
Rod Laver
Rodney George Laver, conocido popularmente como Rod Laver, es un legendario tenista profesional australiano nacido el 9 de agosto de 1938 en Queensland, Australia, y se crió en la zona rural de Rockhampton. Su padre, Roy, era ganadero, y su madre, Melba, una experta tenista que conoció a su marido en un torneo en la ciudad de Dingo, en Queensland. El tenis formaba parte de la vida familiar de los Laver. Siempre había una cancha cerca de su casa y Rod empezó a jugar a los seis años. Con una raqueta de segunda mano a la que le habían adaptado el mango para su pequeña mano, Laver jugó con sus dos hermanos mayores y a los 13 años, perdió contra su hermano Bob en la final junior de Queensland Central.
Conocido como "The Rocket", Laver está considerado como uno de los jugadores más dominantes y exitosos de la historia del tenis. Sus logros y récords hablan por sí solos. Es el único jugador masculino que ha ganado los cuatro títulos de Grand Slam en el mismo año, no una, sino dos veces, en 1962 y 1969. También ganó el "Grand Slam Pro" en 1967, durante su periodo profesional, cuando no podía competir en los Majors. Laver es también uno de los jugadores que ha ganado los cuatro Majors en su carrera.
La carrera del oceánico es sencillamente fenomenal. Ostenta el récord de títulos ganados en su carrera con la asombrosa cifra de 200 torneos, de los cuales 47 son títulos son ATP. El estilo de juego de Laver se caracterizaba por su agresividad en la línea de fondo, su rapidez y su destreza en la red. Era conocido por su revés, considerado uno de los mejores de la historia del tenis.
El dominio de Laver en el tenis no se limitó a los Grand Slams. Ganó otros muchos torneos y fue número 1 del mundo durante siete años consecutivos, de 1964 a 1970, aunque esto no fue reconocido oficialmente. También formó parte del equipo australiano que ganó la Copa Davis en cinco ocasiones entre 1959 y 1973.
Rod Laver ha sido honrado por Roger Federer y su equipo, ya que el torneo por selecciones que enfrenta a Europa con el Resto del Mundo lleva su nombre, la Laver Cup, destacando su influencia y legado en el deporte blanco.