Eugenie Bouchard cedió en tres sets ante Jelena Ostapenko en el partido válido por los octavos de final del Abierto de Guadalajara con el marcador final de 5-7 6-2 1-6. En general fue un torneo positivo para la canadiense que logró llevarse la satisfacción de vencer a Kayla Day en la primera ronda con un marcador de 7-5 6-3 y luego jugarle durante una parte del partido a la par a la letona número 23 del ranking mundial.
Genie vuelve a jugar después de una larga pausa de 17 meses por una operación de hombro. Desde su regreso al Tour a mediados de agosto, ha jugado cinco torneos del cuadro principal, cosechando 5 victorias y 5 derrotas, una cantidad considerable teniendo en cuenta el largo parón.
La joven de 28 años, natural de Montreal, trabajó en televisión como columnista para el Tennis Channel durante su parón, aunque echó mucho de menos el tenis. Ella misma lo explicó: "Prefiero mucho más jugar al tenis.
Fue agradable hacer diferentes actividades fuera de la pista mientras estaba fuera. Sinceramente, estar en la televisión en directo me ayudó a llenar esa necesidad de adrenalina que me faltaba mientras jugaba al tenis.
Lo reprodujo un poco. Me impulsó a desafiarme a mí mismo y a salir de mi zona de confort. Prefiero sudar en la pista. Siempre podré hacerlo más adelante. Todavía quiero jugar al tenis unos cuantos años".
Eugenie Bouchard cautivó a sus fans
En México, Bouchard fue prácticamente la favorita de los aficionados. Después de vencer a Day en su debut en Guadalajara, Bouchard se tomó un momento para agradecer a sus fans mexicanos.
Genie dijo: "Sí, como dije en la cancha, realmente siento un apoyo especial. Son realmente apasionados por el tenis. Creo que puedo hablar por todas las jugadoras cuando digo que nos encanta jugar frente a gente que aprecia nuestro trabajo.
Los aficionados de aquí definitivamente lo hacen. Son fanáticos del tenis, así que es muy divertido". Bouchard llegó a la cúspide de su carrera en 2014, a los 20 años, cuando alcanzó las semifinales del Abierto de Australia y de Roland Garros, pero sobre todo la final de Wimbledon, donde solo cedió ante Petra Kvitova.
Ese fantástico año llevó a la canadiense a ser la número 5 del mundo y a ganar su único título WTA en Núremberg. Ahora con los dieciseisavos ganados en México subirá 88 posiciones avanzando hasta el puesto 342 de la clasificación mundial que puede ser un punto de partida para intentar el ascenso.
Mientras tanto, la canadiense deleitó a sus seguidores con nuevas y encantadoras fotos en traje de baño en Instagram:
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