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Es su segunda casa, después de Tandil claro está, un Abierto de los Estados Unidos donde Juan Martín Del Potro se ha vuelto a instalar en semifinales después de quedarse con el duelo de las alturas ante John Isner por 6-7 (5-7), 6-3, 7-6 (7-4) y 6-2, un compromiso donde el número tres del planeta tuvo una increíble discusión con el juez de silla Carlos Ramos.
Cuando el partido estaba 6-7 y 2-1 para el argentino, la Torre solicitó ir al baño para cambiarse los pantalones cortos, pero la respuesta fue negativa por parte del árbitro. "Voy rápido", dijo Juan Martín, que al escuchar el no del juez se molestó.
"¿Por qué no puedo? Me dijeron que podía ir en el cambio de lado. Tengo 90 segundos... Me puedo cambiar aquí si quieren", dijo el tercer favorito de la competición estadounidense.
Tras cambiarse la vestimenta en otro día lleno de humedad y calor en Nueva York, Delpo soltó otro reclamo al juez.
"La próxima, si querés que venga acá (por el baño) pueden poner toallas, bebidas o algo. Es un desastre ese baño", cerró el tandilense, que explicó en la entrevista televisiva con ESPN lo sucedido.
"Estaba empapado y quería ir corriendo. No tenía problemas de cambiarme acá. Tuve que esperar, estaba empapado y se hizo muy duro", reconoció el campeón de este Major en 2009.
En el encuentro contra Fernando Verdasco Del Potro también tuvo un momento tenso durante su choque ya que un aficionado gritó cuando el iba a ejecutar un revés, momento donde el argentino discutió con el aficionado y con el juez de silla en un momento clave del duelo ante el español, que en ese momento le quebraba el servicio al argentino.