Parecen los viejos tiempos, no solo por ver a Roger Federer avanzar con autoridad en Wimbledon, también porque una gran campeona como Serena Williams lo hace con el mismo ritmo, imponente ante quien se atreva a hacerle frente.
La siete veces ganadora de este torneo ha necesitado de apenas 66 minutos de acción para doblegar a la búlgara Viktoriya Tomova con marcador final de 6-1 y 6-4 en el marco de la segunda del torneo más tradicional del deporte blanco, un choque entre la número 181 del mundo y la 135, vivieron un partido que curiosamente se celebró en la Cancha Central, pero hablamos de la ex número uno del mundo y dueña de 23 coronas de Grand Slam, Serena Williams.
Serena, 25° preclasificada, se quedó con la primera manga al conseguir dos de tres puntos de quiebre, un parcial donde ganó el 91% de los puntos que disputó con su primer sasque, 22 minutos y ya tenía el primer set en sus manos.
En la segunda manga se soltó un poco a jugar Tomova que tuvo hasta una chance de recuperar su saque, pero Williams volvió a estar muy sólida con su servicio al mostrar una efectividad de 70% con el primero, de los cuales se quedó con el 81% de los mismos tantos disputados.
La ex número uno del mundo tendrá una exigente prueba en la siguiente ronda cuando se mida a la francesa Kristina Mladenovic, pero la estadounidense confirma que puede ser considerada como una seria candidata a su octavo título en la Catedral del tenis, sobre todo si se toma en cuenta que suma una cadena de 16 partidos ganados al hilo en esta competición, ya que ganó el título en 2015 y 2016, mientras que el año pasado no pudo competir porque se encontraba embarazada.